La Logopedia neonatal se ocupa de un amplio espectro de habilidades que contribuyen al desarrollo integral del neonato. Desde la alimentación hasta la respiración y las funciones orales, la logopedia neonatal aborda distintas áreas imprescindibles para garantizar el bienestar y el desarrollo óptimo en los primeros días de vida del recién nacido.

Alimentarse adecuadamente es esencial para el crecimiento y desarrollo de un bebé. La logopedia neonatal se centra en evaluar y tratar posibles dificultades relacionadas con la succión, deglución y masticación, habilidades básicas para una alimentación no solo segura, si no también eficaz. Además, debemos resaltar que una correcta alimentación, nos asegura la ganancia de peso y la aportación de nutrientes, aspectos indispensables para el desarrollo mental y físico adecuado del bebé.

En Araceli Carrera Logopedia te ayudamos a:

o hacer una toma eficaz sin que tu bebé se canse o se duerma
o dar...

La Logopedia neonatal se ocupa de un amplio espectro de habilidades que contribuyen al desarrollo integral del neonato. Desde la alimentación hasta la respiración y las funciones orales, la logopedia neonatal aborda distintas áreas imprescindibles para garantizar el bienestar y el desarrollo óptimo en los primeros días de vida del recién nacido.

Alimentarse adecuadamente es esencial para el crecimiento y desarrollo de un bebé. La logopedia neonatal se centra en evaluar y tratar posibles dificultades relacionadas con la succión, deglución y masticación, habilidades básicas para una alimentación no solo segura, si no también eficaz. Además, debemos resaltar que una correcta alimentación, nos asegura la ganancia de peso y la aportación de nutrientes, aspectos indispensables para el desarrollo mental y físico adecuado del bebé.

En Araceli Carrera Logopedia te ayudamos a:

o hacer una toma eficaz sin que tu bebé se canse o se duerma
o dar los descansos que necesita para que no se fatigue mientras hace la toma
o evitar que tosa o se atragante
o evitar que se irrite mientras come
o detectar señales de estrés del bebé durante la alimentación para adaptar las herramientas y apoyos para su alimentación.
o hacer una transición de la alimentación enteral (por sonda nasogástrica u orogástrica) a alimentación oral (por boca)
o comunicarte con tu bebé mientras es alimentado
o evitar futuras complicaciones con respecto a la alimentación como aversiones a ciertos alimentos y/o rechazo alimentario.